La pedagogía es la clave para lograr un sistema más participativo y que integre a los jóvenes en la toma de decisiones y en la vida pública de los municipios. Es una de las conclusiones principales de las terceras Jornadas Andaluzas de Democracia Participativa que se han celebrado este fin de semana en Peligros, bajo el enfoque ‘Herramientas de trabajo con jóvenes y presupuestos participativos’.
Educar en la participación es el fin del colectivo Edupar, organizador, junto con el Ayuntamiento de Peligros, de estas jornadas en las que jóvenes procedentes de varios municipios han creado un espacio de reflexión en torno a la participación de la juventud en las políticas municipales. Un espacio del que han salido críticas al sistema que ha impedido o dificultado la codecisión por parte de la ciudadanía, en general, y de la juventud, en particular.
Así, la pedagogía participativa a edades tempranas, trabajando en los centros educativos, con niños y jóvenes, y la dotación de fondos públicos para estos objetivos, han sido las herramientas que han generado un consenso en estas jornadas andaluzas, celebradas en el Espacio Joven La Espiral, cuya gestión es un ejemplo de cogestión, entre el Ayuntamiento de Peligros y los colectivos juveniles de la localidad. Colectivos como la Asociación de Músicos de Peligros, que organizó un concierto para animar la noche del viernes. Luis Cotarelo, del colectivo Edupar, recordó que no es habitual contar con espacios físicos para la participación, como La Espiral, y agradeció al Ayuntamiento hacer posibles estos espacios.
Aún reconociendo los esfuerzos de la Junta de Andalucía en los últimos tiempos (por segundo, los ayuntamientos tienen subvenciones para realizar presupuestos participativos), con la elaboración de la Ley de Participación Ciudadana, cuyo anteproyecto ya está listo para ser debatido en el Parlamento, y que ha contado con las opiniones y aportaciones de 5.500 personas, los asistentes a las jornadas han criticado que las instituciones “no se acaban de tomar en serio la participación” y no apuestan por ella como por otras áreas como, por ejemplo, obras o deportes.
Jóvenes y representantes municipales de Peligros presentaron la experiencia participativa desarrollada en el municipio por el actual equipo de gobierno, los dos presupuestos participativos ya hechos realidad en dos ejercicios consecutivos, y el nuevo proceso de presupuestos que se pondrá en marcha en los últimos meses de este año de cara al ejercicio 2015.
“El cumplimiento de lo que ha pedido o decidido la ciudadanía, no frustrar esas expectativas, es fundamental para consolidar los procesos de participación”, advirtió el concejal de Participación y Comunicación en el Ayuntamiento de Peligros, José Antonio Paniagua. “Hay que construir herramientas y espacios para la participación porque los responsables políticos, los actuales y los que estén por venir, no están educados en participación, no existen técnicos municipales de participación –como sí hay de juventud y deportes”, añadió.
El alcalde de Peligros, que inauguró las jornadas el viernes, defendió el papel del municipio como “epicentro y lugar de encuentro en políticas de participación”, y afirmó que la localidad es punta de lanza provincial en juventud (“La mejor muestra es este edificio, hoy copado y ocupado por la gente joven, como espacio de codecisión”.), en y en presupuestos participativos (“Otro modo de entender cómo se gestiona el dinero público.”), siendo Peligros, hasta ahora, el único pueblo de la provincia de Granada que ha optado por este sistema de distribución de los fondos municipales en función de una consulta popular, a través de asambleas en las plazas y de votaciones en las urnas, para conocer las preferencias del vecindario.
Roberto García estuvo acompañado en la inauguración por la coordinadora provincial de la Dirección General de Derechos de la Ciudadanía, Participación y Voluntariado en Granada, María Piedad Castillo, y por Luis Cotarelo, miembro de Edupar. Castillo recordó que Peligros ha contado mucho en la elaboración de la Ley Andaluza de Participación, una norma que se traducirá en la práctica en hechos concretos como que todos los ayuntamientos andaluces tendrán que contar con un reglamento de participación, o que ésta (la participación) es reconocida como un derecho subjetivo de la ciudadanía: se puede reclamar a las instituciones por el hecho de ser ciudadano o ciudadana. Luis Cotarelo se centró en las potencialidades de los jóvenes como colectivo: “La juventud no es un problema, y a veces nos cuesta hacerles comprender esto a los políticos; los jóvenes son parte de las soluciones a los problemas que hay en una sociedad, por la creatividad, por la fuerza… Cualquier sociedad sana tiene que contar con los jóvenes”, defendió Cotarelo.